Salma Hayek volvió a ponerse en los zapatos de Frida Kahlo, durante su aparición en el último concierto de Madonna en México, como lo hizo hace 22 años, cuando en 2002 protagonizó “Frida”, la película en la que Julie Taymor retrata la historia de amor que existió entre la retratista mexicana y el muralista Diego Rivera, un proyecto que supuso gran complejidad para la actriz, como ella misma lo reconoció en aquella época.
A pesar de que “Frida” se estrenó en el otoño del 2002, Salma ha confesado que fue una producción que requirió de siete años de trabajo para que pudiera ver la luz.

Para la actriz mexicana, Kahlo es una de sus heroínas, por lo que enfrentarse a trabas creativas, llegó a pensar que lo mejor era no rodar el proyecto que persiguió por más de un lustro: “Podría haber hecho la película hace cinco años, tal vez hace seis años, pero nunca sentí que todos los elementos estuvieran ahí, quería hacer una película sobre Frida Kahlo, pero quería hacer la película ´correcta´ sobre Frida Kahlo o no hacerla”, dijo en una entrevista, concedida en 2002, en San Francisco.