[San Luis Hoy]
Recintos culturales del Centro Histórico, como la casa museo de Mariano Jiménez, de la calle 5 de Mayo, son arruinadas por el flagelo del grafiti.
El inmueble donde nació uno de los principales líderes insurgentes de la primera etapa de la lucha independentista, muestra desde mayo, algunas pintas realizadas en parte con gis y en parte con pintura de aerosol, que muestran caracteres ilegibles y la imagen de un cocodrilo.
Otras firmas de grafiteros se localizan también a la izquierda de la puerta de acceso principal y en el muro que queda entre ventanales.
De las expresiones de grafiteros no se salvó ni siquiera un hidrante colocado en la división entre la casona de Mariano Jiménez y la vivienda que le sigue. Esta toma de agua fue tapizada con calcomanías, que forman parte de otra forma de expresión juvenil marginal.
Como la casa de Jiménez, otros recintos culturales han sido intervenidos por grafiteros. Ejemplo: La casa del poeta Ramón López Velarde, en la esquina de Pedro Vallejo e Ignacio López Rayón, o la casa del poeta Manuel José Othón, en la calle del mismo nombre, entre Mariano Escobedo y José María Morelos y Pavón.
Fotografía / OMAR HDZ