Martín Rodríguez [San Luis Hoy]
La restauración de la fachada de la Catedral avanza a paso lento a partir de que se cayeron algunas piezas cuya colocación data del siglo XIX, y que solo han recibido mantenimiento superficial con el paso de los años y en las proximidades de los aniversarios de la Diócesis.
La última restauración de la fachada de la Catedral que incluyó la intervención de la torre norte, a manos de especialistas de la Facultad del Hábitat de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, ocurrió en el año 2004, previo a los festejos del 150 aniversario de la creación de la Diócesis de San Luis Potosí, obra encargada por el entonces arzobispo Luis Morales Reyes.
Ahora, en el gobierno eclesial de Jorge Alberto Cavazos Arizpe, fue ordenada la reposición de piezas que se han deteriorado con el salitre, la humedad y temperatura.
Aunque la cantera se puede sostener por más de un siglo, el contacto constante con las heces de las palomas debilita los materiales y los convierte en polvo.
En el cerco de madera instalado en la zona de obra, para evitar que se crucen las personas, hay materiales en espera de ser utilizados y herramientas. Inicialmente, los trabajadores sustituyeron algunas piezas de cantera que se vencieron con el transcurso de las décadas y el salitre provocado por las palomas.

