
-
YA han pasado 27 años y medio, desde que el gobierno de Fernando Silva Nieto modificó todas las rutas de transporte urbano, con el fin de alargar recorridos y conectar la ciudad de extremo a extremo con apenas 26 itinerarios, a los que se fueron agregando más con el paso de los años…
SE supone que la idea era disminuir el riesgo de falta de movilidad, conectar toda la periferia con el centro de la ciudad y crear algunas rutas por niveles de necesidad. Por ejemplo, de ciertas colonias al Hospital Central, la Zona Universitaria o la Central de Abastos para con ello bajar la frecuencia de transbordos a medio camino…
EL punto es que las rutas fueron rebasadas por el crecimiento de la ciudad y más de un cuarto de siglo después, ya hay 63 rutas de los permisionarios y las empresas de transporte urbano, la última de ellas con una conexión hasta Ahualulco por la misma tarifa, decisión que además de representar un gasto excesivo, técnicamente tronará a las líneas de transporte foráneo que por ahí pasan…
TAMBIÉN aumentaron los itinerarios con el denominado “pollobús”, que lleva en sus recorridos un circuito y tres rutas hacia la Alameda y aún así no hay conectividad suficiente…
EL estudio de El Colegio de San Luis es apenas uno de los indicios visibles de que el sistema de transporte público todavía es imperfecto, los choferes y empresarios hacen malabares para trazar rutas, en algunos casos bajan la cantidad de camiones al mínimo sostenible y a veces ni a eso llegan…
LA conclusión del estudio no es ninguna cifra improvisada o tomada al vapor como las que producen los organismos encuestadores, estos últimos, con muy altos márgenes de error por la propia naturaleza de que los números son el dicho de los encuestados y no necesariamente una realidad demostrada…
AQUÍ, los científicos sociales se fueron directamente con la gente involucrada en las carencias de transporte público, platicaron con jóvenes que no tienen forma de movilizarse o que encuentran graves problemas logísticos para llegar a tiempo a una institución educativa, ya sea porque una ruta no llega o porque el transbordo acabaría con sus aspiraciones de llegar temprano a clases…
ES cierto que las escuelas se encuentran en lugares accesibles, pero también el hecho de que algunas rutas de transporte público son engorrosas, los camiones pasan muy distanciados uno del otro, o en el peor de los casos el camión ni siquiera llega…
TAMBIÉN de las carencias de transporte depende la calidad de vida y a veces por falta de un camión se enfrenta la imposibilidad de moverse y acaba con la buena voluntad de los jóvenes para estudiar una carrera universitaria…
HACE tiempo que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes del Estado ha repensado un rediseño de rutas, pero es fecha que no da al clavo.
POSDATA: Hace falta menos quejadero y más acción. Es cierto que el Interapas no se da abasto para mandar el agua de lluvia por un tubo, pero también lo es que Soledad no tiene suficientes desfogues para que los charcos se vayan al caño. Ese problema no se solucionará pronto, ni sacando del Interapas a la alcaldía. Ni siquiera se logrará un mejor suministro del agua, pero sí el control administrativo del servicio y por supuesto la cobranza.
REMATE: No sean así. Quien pueda y si tiene oportunidad vaya y tramite su testamento y no den más dolores de cabeza a los novatos jueces.