(EFE)
Washington.- El presidente estadounidense, Joe Biden, y su antecesor, Donald Trump, se midieron este jueves en un cara a cara con capacidad de cambiar el rumbo de las presidenciales. Un debate en el que el republicano se mostró más agresivo y en el que al demócrata le costó hilar mensajes y apareció dubitativo y con problemas de voz.
Los titubeos en el caso de Biden, que llegó con gripe, y las expresiones de burla por parte de Trump cuando su rival divagó y dejó en más de una ocasión frases sin acabar, marcaron el debate. “Nunca he escuchado tantas tonterías”, dijo el actual inquilino de la Casa Blanca al oír hablar de política exterior, un capítulo en el que Trump se quejó de que la reputación de Estados Unidos bajo el mandato del demócrata haya pasado a ser “horrible”.
La inmigración ofreció el escenario más fructífero para los reproches mutuos. Trump acusó a Biden de haber convertido el país en un “nido de ratas” al no poner freno a la entrada de “criminales” y provocar que los inmigrantes estén matando a los estadounidenses, mientras que el presidente tachó de “ridícula” esa afirmación, que no se sustenta con cifras.
Para Biden, votar por Trump es votar contra la democracia. Para el republicano, en cambio, que Biden siga en el poder acabaría con Estados Unidos: “Si gana, nuestro país no tiene ninguna posibilidad. Probablemente no nos quede ningún país. Así de malo es. Es el peor de la historia. Si me dan otros cuatro años, yo seré el mejor”.
Trump negó cualquier responsabilidad por su parte en el ataque al Capitolio del 6 de enero de 2021, pero Biden le recordó que no tiene las manos limpias ni en ese caso ni en los otros tres procesos penales que afronta: “Tiene la moral de un gato callejero”.
Para Trump, Biden es un presidente “manchurio” “pagado por China”, que sin embargo ha provocado que la situación con Pekín sea la peor en la historia: “Nos están matando como país si sigue permitiendo que sigan haciendo lo que nos están haciendo”.
La sorpresa de la noche llegó en boca de Trump: “No nos comportemos como niños”, afirmó el republicano en este encuentro, cuyo formato permitió pese a todo una exposición ordenada de argumentos, que los ciudadanos votarán en las urnas el próximo 5 de noviembre.