
(EFE)
Jartum, Sudán.- Alrededor de 300 civiles, entre ellos 15 mujeres y 21 niños, fueron asesinados en los últimos días por el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) en Nahud, en el estado de Kordofán Occidental y adyacente a la región occidental sudanesa de Darfur, informó este sábado una organización gubernamental.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos sudanesa dijo que esta “nueva masacre contra los civiles” se suma al saqueo de suministros médicos, mercados y del hospital de Nahud, ciudad que fue tomada el viernes por las FAR y considerada un punto vital para el envío de tropas del Ejército hacia Darfur, según un comunicado.
En los últimos días, varias organizaciones locales, como la Red de Médicos de Sudán o la asociación Abogados de Emergencia, alertaron de que varios civiles fueron “ejecutados” en la urbe por los paramilitares, que desde el inicio de la guerra han asesinado a cientos de civiles tras acusarlos de pertenecer al Ejército.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores sudanés condenó en un comunicado la “nueva y horrenda masacre” en Nahud, que aseguró que tuvo lugar “en los últimos dos días” y que fue perpetrada “por motivos étnicos”, mientras que denunció que pudo verificar imágenes que muestran “el pisoteo de los cuerpos de las víctimas” por parte de las FAR.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos, además, alertó de que las cifras de muertos “son preliminares y pueden aumentar debido al asedio de las FAR a la ciudad” y los impedimentos que ponen los paramilitares a la salida de los residentes de la urbe.
“Impedir que los civiles abandonen las zonas de conflicto es una grave violación de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario, un crimen de guerra y un crimen de lesa humanidad”, señaló la comisión de DH.