
(EFE)
Washington.- Elon Musk se despidió este viernes de su cargo de Gobierno en un acto celebrado en la Casa Blanca en el que el presidente Donald Trump lo cubrió de halagos por su labor y en el que el magnate tecnológico dijo que seguirá asesorando al mandatario, eludiendo sus recientes críticas.

“Seguiré visitándolo y seré amigo y asesor del presidente. Espero con ansias volver a estar en esta increíble sala”, declaró Musk en el Despacho Oval, donde vistió gorra, americana y camiseta negra.
El hombre más rico del mundo explicó que deja el Gobierno porque expira su contrato temporal de 130 días, pero subrayó que “este no es el final de DOGE”, siglas del controvertido Departamento de Eficiencia Gubernamental que él creó y que ha dirigido para recortar los gastos de la Administración federal.
Musk anunció el jueves su salida definitiva del Gobierno un día después de haber expresado críticas contra el gran plan fiscal de Trump que, a su juicio, aumentará el déficit público y pondrá en peligro los resultados del DOGE.
“Elon realmente no se va. Va a estar yendo y viniendo. Tengo la sensación de que (DOGE) es su bebé y creo que va a hacer muchas cosas”, dijo propio Trump, que quiso insistir en que “el servicio de Elon a EU ha sido incomparable en la historia moderna”.