
Cuatro hombres asesinados, el saldo final
(El Universal)

La Paz, BCS.- Una jornada violenta se desarrolla este sábado en La Paz, con persecuciones y balaceras en diversos puntos de la ciudad, con saldo hasta al momento de cuatro hombres asesinados, uno de ellos jefe de operaciones especiales de la Procuraduría General de Justicia del estado (PGJE).
Se trata de Mario Quezada, líder grupo de operaciones en la dependencia, quien, según los primeros reportes, el comandante en jefe se encontraba con otro elemento ministerial cuando fue agredido a balazos por desconocidos, en la colonia Jericó, al sur de la ciudad.
Los elementos de investigación repelieron la agresión y resultó uno de los atacantes muerto en el lugar.
La situación generó un amplio despliegue de seguridad en diversas colonias, confirmó a El Universal el secretario general de Gobierno, Saúl González Núñez, quien refirió que se realizaron operativos en varios domicilios para lograr la detención de presuntos delincuentes.
Confirmó que en otro de los enfrentamientos en las inmediaciones de la colonia Roma y 20 de Noviembre, resultó herido otro elemento ministerial y dos presuntos delincuentes fallecidos.
Dijo que se encuentran desplegados elementos de diversas corporaciones de seguridad y efectivos militares quienes resguardan varios puntos de la ciudad.
Por otra parte, según han narrado testigos, se han registrado irrupciones de gente armada en la colonia Tutus, al sur de La Paz, así como persecuciones en las colonias El Cardoncito, La Pitahaya, La Fuente.
Algunos vecinos han compartido videos e imágenes de las balaceras y advierten del clima de tensión y temor de esta tarde en la capital del estado.
Este domingo se cumplen dos meses del asesinato del comandante Ulises Omar Cota Montaño, comandante de la Agencia de Investigación Criminal, abatido a balazos en la colonia Camino Real.
Los hechos ocurrieron en el contexto de una confrontación entre grupos criminales ligados al Cártel de Sinaloa. Según reconocieron las autoridades el homicidio del comandante obedeció a una venganza, ante las operaciones que han desarrollado como parte del combate a la delincuencia.
Desde entonces, diversos mandos y elementos de seguridad fueron objeto de amenazas con ataques frontales.