
(AP)
Minneapolis, Minnesota.- Activistas por una reforma policial y defensores de los derechos civiles se sumaron el domingo a miles de personas para conmemorar el quinto aniversario del asesinato de George Floyd y arremetieron contra el gobierno del presidente Donald Trump por acciones que, según ellos, han retrasado varias décadas sus esfuerzos.

A un costado de la tumba de Floyd en Houston, el reverendo Al Sharpton dijo en un servicio con la familia del fallecido que Floyd, de 46 años, representaba a todos aquellos “que están indefensos contra personas que piensan que nos pueden poner la rodilla en el cuello”.
Comparó el asesinato de Floyd con el de Emmett Till, un niño de raza negra de 14 años que fue secuestrado, mutilado y linchado en Mississippi en 1955 después de que fue acusado de ofender a una mujer blanca.
“Lo que Emmett Till fue en su momento, George Floyd lo ha sido para este momento en la historia”, afirmó Sharpton.
Los eventos en Minneapolis giraron en torno a la Plaza George Floyd, la intersección en donde el agente de policía Derek Chauvin presionó con su rodilla el cuello de Floyd contra el pavimento durante nueve minutos y medio, incluso mientras Floyd gritaba “No puedo respirar”.
Al mediodía del domingo, una oleada constante de personas rendía homenaje frente a un altar ubicado frente a Cup Foods, donde fue asesinado. Al otro lado de la calle, activistas establecieron una zona de alimentación en una antigua gasolinera que a menudo ha servido como área de preparación desde la muerte de Floyd. En medio de la calle se colocó una cabeza de cerdo falsa montada sobre un palo.