
(AP)
Ciudad del Vaticano.- Los preparativos para el cónclave del que saldrá el nuevo papa se aceleraron el viernes con la instalación de la chimenea sobre la Capilla Sixtina que señalará la elección del sucesor de Francisco.

Los bomberos del Vaticano fueron vistos en el tejado de la Capilla Sixtina instalando la chimenea, un momento clave en los preparativos para el cónclave que comienza el 7 de mayo.
Después de cada dos rondas de votación en la Capilla Sixtina, las papeletas de los cardenales se queman en un horno especial para indicar el resultado al mundo exterior.
Si no hay acuerdo para la elección del nuevo papa, las papeletas se mezclan con cartuchos que contienen perclorato de potasio, antraceno -un componente del alquitrán de hulla- y azufre para que se produzca un humo negro. Pero si hay un ganador, las papeletas quemadas se mezclan con clorato de potasio, lactosa y resina de cloroformo para generar el humo blanco.
La instalación de la chimenea se produjo mientras los cardenales llegaban al Vaticano para otro día de discusiones previas al cónclave acerca de las necesidades futuras de la Iglesia católica y del tipo de papa que se necesita para dirigirla.
En estas consultas participan todos los cardenales, incluyendo los mayores de 80 años, que no pueden votar en el cónclave.
En los últimos días, han escuchado reportes sobre la grave situación financiera del Vaticano y han tenido la oportunidad de hablar individualmente sobre las prioridades para el futuro y los problemas que identificaron en el pontificado de Francisco.
“El papa tiene que asegurar la unidad de toda la Iglesia”, afirmó el cardenal Fernando Filoni, el exdirector de la oficina de evangelización vaticana.
“Esto es lo primero y más importante. Todo lo demás viene después”, apuntó el cardenal de 79 años a su llegada a las discusiones previas al cónclave.