(EFE)
Nueva York.- Artículos de consumo tan cotidiano en Estados Unidos como los aguacates, los tomates ‘cherry’ o el jarabe de arce pueden ver subir sus precios por las nubes como efecto inmediato de los aranceles de Donald Trump.
Tomates y aguacates, que constituyen la imagen misma de la alimentación saludable, proceden básicamente de México: la mitad del tomate producido en suelo mexicano se destina al mercado estadounidense.
En cuanto a los aguacates, el 80 % de lo que se consume en Estados Unidos viene de México, según un estudio de la Universidad de Florida.
¿Qué decir de las bebidas alcohólicas? Desde hace dos años, la Modelo mexicana se erigió como la cerveza más vendida en todo Estados Unidos, desbancando a la local Bud; y también otras como Corona o Pacífico se encuentran prácticamente en todos los bares y supermercados del país.
Entre los licores, el tequila mexicano está lejos de ocupar el trono del whisky, pero ya es el licor más vendido en todos los estados fronterizos con México, de California a Texas, y su consumo en todo el país crece a un ritmo del 9 % anual.
Los productos canadienses no son tan ubicuos como los mexicanos, con una excepción: el jarabe de arce, un producto casi obligatorio en un ‘desayuno americano’ para regar una montaña de panqueques.