Leonel Mora
[San Luis Hoy]
Lo que inició como un pequeño boquete en el pavimento a causa de una obra de drenaje en la calle de Valentín Amador, en la cabecera municipal de Soledad, se ha convertido ya en un fuerte hundimiento que obliga a los automovilistas a invadir el carril contrario de dicha vialidad.
Además, la ampliación del hundimiento está a punto de imposibilitar el paso a vehículos que requieren entrar o salir de la Privada de la Plata, sector en el que habita al menos una veintena de familias.
El desperfecto se ubica en el tramo que va de la privada de Oro a la privada de Plata, en sentido noreste – suroeste, con rumbo a la avenida San Pedro.
Automóviles compactos, taxis, camiones de reparto de mercancías, materialistas y hasta autobuses urbanos de pasajeros deben invadir el carril contrario para evitar el riesgo de pasar sobre el hundimiento.
Residentes cercanos dijeron que las fuertes cuarteaduras del pavimento vienen “desde hace como un mes o mes y medio” y que todo empezó con una obra de reparación de tubos de drenaje.
La calle Valentín Amador, diferente a la avenida del mismo nombre, es una ruta transitada para ir de la cabecera municipal a la avenida San Pedro y más allá o viceversa. En ella han surgido en los últimos meses, negocios nuevos como supermercados y farmacias de cadena nacional.