Flor Martínez
[San Luis Hoy]
El 24 de septiembre, la Parroquia de Nuestra Señora de las Mercedes, ubicada en la colonia Industrial Mexicana, celebra su Fiesta Patronal con un amplio programa religioso y cultural en honor a su Santa Patrona, además del mercado La Merced, ubicado en la capital potosina, que de igual manera, los locatarios realizan los festejos en honor a la imagen.
Desde el l4 de septiembre, distintos sectores y grupos parroquiales organizaron actividades, entre ellas rifas, kermés, danzas, mariachi, así como rezos del Santo Rosario.
Cada día está dedicado a un sector o advocación, con la participación de asociaciones religiosas, catequistas y peregrinos. El 24 de septiembre, fecha central de la festividad, las celebraciones iniciaron desde las 6:00 de la mañana con repique de campanas, mañanitas y misa comunitaria.
Posteriormente se llevaron a cabo danzas, misa de unción de enfermos, presentación de mariachi, rosario y, a las 7:00 de la tarde, la Solemne Concelebración Eucarística presidida por el arzobispo Don Jorge Alberto Cavazos Arizpe acompañado de sacerdotes invitados. Al término, se realizará la tradicional quema de pólvora.
Como parte del cierre, el 28 de septiembre se celebrarán confirmaciones y una eucaristía también presidida por el arzobispo Cavazos Arizpe.
El Consejo Parroquial agradeció la participación de la comunidad y exhortó a los feligreses a integrarse a las distintas actividades en honor a la Virgen de las Mercedes durante este día.
En el mercado La Merced, desde el 23 de septiembre llevaron a cabo los tradicionales rosarios, se ofrecieron como reliquias molletes, así como actividades de lucha libre, danzón y la presentación de grupos norteños y la quema de toritos.
Este día los festejos continuaron con la misa a las 7 de la mañana, posteriormente las mañanitas con mariachi, la misa a las 13:00 horas presidida por el Pb. Jorge Samuel Álvarez, párroco de San Sebastián Mártir, continuando con una función de lucha libre por la tarde, la presentación de un grupo de cumbia y la quema de pólvora antes de la medianoche.
La devoción a Nuestra Señora de la Merced surge en 1218 en Barcelona, cuando la Virgen se apareció a San Pedro Nolasco para inspirarlo a fundar una orden dedicada a la redención de cautivos cristianos en manos de musulmanes, obra que contó con el apoyo del rey Jaime I de Aragón y de San Raimundo de Peñafort. Así nació la Orden de la Merced, aprobada en 1235 por el Papa Gregorio IX, cuya misión se centró en la misericordia y la liberación, llegando a entregar sus propias vidas por los prisioneros. Desde el siglo XIII, la devoción se expandió rápidamente por España, Francia, Italia y posteriormente América, convirtiendo a la Virgen de la Merced en un símbolo de libertad, misericordia y redención.