Miguel Barragán
[San Luis Hoy]
CIUDAD VALLES.- A pesar de que el Gobierno del Estado entregó la operatividad del incendio de Zaragoza al mediodía del sábado pasado, 25 de mayo, el fuego recomenzó en la parte más alta y escarpada de la sierra, sólo que ahora hay
menos brigadistas.
Durante el combate al incendio, cuando estaba en los ranchos El Tecolote y El Tigre, en Casas Viejas, llegó a haber hasta 90 brigadistas entre gente de Conafor, Protección Civil y habitantes de las comunidades de Zaragoza y la misma Casas Viejas.
No obstante, horas después de que se entregó el incendio y los helicópteros de Gobierno del Estado y de la Fuerza Aérea Mexicana se retiraron, brasas insidiosas se encendieron en la parte alta del macizo montañoso, en lugares a dónde es difícil acceder por lo escarpado del terreno y a dónde solamente hoy estuvieron combatiendo 17 elementos de Conafor, nada más que no hay más manos que ayuden y no hay naves apoyando desde el aire.
La necesidad primordial son sierras eléctricas, palas, picos, y material para enterrar el fuego, ya que subir con agua a cuestas es una tarea que roba las fuerzas antes de llegar a la parte alta.
Algunos de los brigadistas opinaron que no se debió haber entregado el siniestro sin percatarse de los residuos de fuego que ahora queman otra vez la zona, con rumbo a Laguna del Mante.