Jesús Vázquez
[San Luis Hoy]
Matehuala.- Las corporaciones de auxilio rindieron homenaje a don Pedro Rangel un hombre que durante toda su vida fue brigadista voluntario, por lo que en su honor acudieron al cortejo fúnebre elementos de Cruz Roja, Protección Civil Municipal y el Heroico Cuerpo de Bomberos quienes sonaron la sirena desde la Catedral hasta el Panteón Guadalupe.
Dieron el último adiós a un héroe sin capa, quien en su vida siempre ayudó a la gente sin esperar nada a cambio, ciudadanos y corporaciones de auxilio le dieron el último adiós, y para despedirlo fue llevado su cuerpo a la Catedral, donde el presbítero Gustavo Tapia ofició una misa en su honor.
El presbítero en la homilía le hizo un gran homenaje, al recordar la gran labor que hizo por la ciudadanía, pues siempre ayudaba a las personas en diferentes situaciones de emergencia, en la entrada y salida de clases a los niños de las escuelas, dijo que sobre todo apoyó mucho en actividades de la iglesia en peregrinaciones, rosarios de aurora, hacia labor y en las fiestas patronales donde hacia labor de Protección Civil.
Don Pedro fue un hombre con una gran nobleza y un gran corazón y se le va a extrañar en todos los eventos religiosos, donde si le decían que salían a las cinco de la mañana, el desde las cuatro ya estaba afuera de la iglesia con su equipo de trabajo.
Al terminar la misa se pidió un minuto de aplausos en su honor, posteriormente el ataúd con los restos de don Pedro los subieron al antiguo camión de bomberos en el que se trasladó varias veces, atrás iba el cortejo fúnebre acompañado de las ambulancias de Cruz Roja y Protección Civil, quienes durante todo el trayecto hasta llegar al Panteón Guadalupe hicieron sonar las sirenas en su honor.
La gente le dio su último adiós, dándole las gracias por todo lo que hizo por Matehuala.