Jesús Vázquez
[San Luis Hoy]
Real de Catorce.- Familias de la comunidad de Guadalupe de Coronado sufren ante la falta de agua en sus casas, y la alcaldesa Guadalupe Carrillo solo envía pipas una o dos veces al mes lo cual resulta insuficiente, pues en la comunidad son como 400 habitantes, además no les permitió hacer un proyecto para abastecerse de agua de los manantiales que están cerca de este lugar y ahora enfrentan las consecuencias.
María del Rosario Guerrero Medina de la comunidad de Ranchito de Coronado, refiere que desde hace mucho tiempo enfrentan problemas por abasto de agua, y dependen de San Antonio para tener líquido, pero desde hace varias semanas no tienen agua, y ellos tenían un proyecto para tener agua de los manantiales de Las Palomas y del manantial del Capulín, para tener su propia fuente de abasto, sin embargo, la presidenta municipal les quitó el proyecto que tenían.
Manifestó el ama de casa que no es justo, pues el agua de estos manantiales se está desperdiciando, siendo que la gente de la comunidad de Ranchito de Coronado no tiene ni una gota de agua en sus casas, y dependen de las pipas de agua que les llevan, pero les llevan el vital líquido cada dos semanas, o a veces hasta más tiempo, y actualmente la gente no tiene nada para darles de tomar a sus animales ni para lavar los platos.
Comentó que hace dos años la gente de la comunidad inició un proyecto para extraer el agua de los manantiales y estaban conectando tuberías para que el agua llegara al depósito de la comunidad de Ranchito de Coronado, pero la alcaldesa Guadalupe Carrillo frenó el proyecto, y les dijo que si continuaban, los habitantes podrían ser encarcelados.
Pero el detalle es que toda esa agua se está tirando hacia el arroyo, siendo que ellos la requieren, y esperan que el próximo alcalde les ayude para poder realizar este proyecto.