 
			[El Universal]
CIUDAD DE MÉXICO. Rosalía está de visita en México para mostrar por primera vez su nuevo disco, “Lux”, mismo que representa una evolución enorme respecto a su último proyecto, “Motomami”, aunque la presión del lanzamiento no le quitó las ganas por explorar la Ciudad de México.
En este álbum la española se inspira de la mística femenina y varias santas cuyas historias le dieron pie a las letras que componen los 15 temas en los que además, canta en 13 idiomas diferentes, entre los que se incluyen ucraniano, alemán, árabe y japonés.
Rosalía compartió un momento especial la noche del 29 de octubre con algunos fans selectos que pudieron asistir a la primera listening party a nivel mundial de “Lux”, en la que señaló su aprecio por el apoyo que le han brindado desde el día uno de su carrera.
Sin embargo, Rosi no podía estar en la capital del país sin faltar a su costumbre de dejarse ver en algún sitio no tan común, pues, por ejemplo, cuando tuvo su concierto en el Zócalo de la Ciudad de México, se reportó su presencia en un gimnasio cercano, lo que ahora cambió por una cena especial.
AMÓ EL POZOLE
Rosalía aprovechó su visita a México para salir a cenar en compañía de los integrantes de Latin mafia, con los que visitó una de las sucursales de “La casa de Toño”, en la que probó las enfrijoladas y el pozole por primera vez en su vida; confesó que sí le gustó, aunque dijo que era un platillo “traicionero” porque picaba, además le sorprendió que llevara lechuga.
