
Leonel Mora
[San Luis Hoy]
Usuarios del Hospital General del ISSSTE, ubicado en la calle de Carlos Diez Gutiérrez, se quejaron más que nada de las “exageradas” restricciones que la institución impone para el ingreso de pacientes y familiares de los pacientes, además de los horarios sumamente limitados de visita.
Añadieron que el servicio es “más tardado que en el IMSS” y que, con frecuencia, faltan medicamentos que luego los familiares deben costear.
Si bien ayer sábado al mediodía fue escasa la presencia de personas usuarias al exterior del nosocomio, algunas de ellas mencionaron que el ISSSTE permite solamente a una persona por paciente y que ésta debe ser relevada cada tres horas. Para otras visitas, el horario es de sólo una hora por las tardes: de 5:00 a 6:00 de la tarde.
Algunos familiares comentaron que sus pacientes tienen tanto el servicio del ISSSTE como el del IMSS y que “ya no es como antes” que el primero se distinguía por tener una atención superior en casi todas sus áreas. Actualmente, algunos de los usuarios han optado por ser trasladado al IMSS ante la falta de atención y resultados del Instituto creado para las y los trabajadores del Estado.
En la caseta de ingreso no permiten introducir cobijas si no es época de frío. Almohadas, “sólo con orden del médico”, y tampoco se permiten colchonetas, sillas, ni introducir alimentos, así como tampoco el uso de teléfonos móviles a los visitantes, pero sí se tolera en el caso de practicantes, personas de servicio social, médicos y enfermeras.
Ante la tardanza en los trámites y servicios, el propio hospital recomienda a las y los usuarios que esperan en el exterior del inmueble, “traer paraguas para sol o lluvia; traer refrigerio y traer banco para la espera en fila”.
De las restricciones, se aprovechan personas que, afuera del hospital, venden diversos alimentos y bebidas e incluso rentan sillas por horas.