Martín Rodríguez
[San Luis Hoy]
Avanzan los días y no baja el nivel del agua en algunos tramos del bulevar del Río Santiago, que se satura en algunos desniveles y provoca encharcamientos. Los escurrimientos han rebasado la capacidad de volumen de eficiencia de los drenes del río.
Hasta ahora, las presas se mantienen en niveles muy altos de llenado, y cualquier posibilidad de lluvia aumenta el riesgo de que sea necesario
el desfogue.
Mientras ello ocurre, el lodo y la hojarasca invaden los conductos de desagüe del bulevar y no permiten la filtración del agua hacia los drenes.
Además, en el caso de la zona por debajo del puente vehicular Rubén Darío, el agua se estanca como una laguna y obliga a los automovilistas a bajar la velocidad.
Algunos otros de los conductores prefieren subir por el acceso al puente y bajar por la aguja de desincorporación de descenso que sale del fraccionamiento Campestre, para evitar daños a su sistema de frenado o los motores, sobre todo en automóviles viejitos.
Hasta este viernes por la mañana, la Policía Vial mantenía cerrado el tráfico vehicular en algunos tramos, con el fin de evitar que algún automovilista se meta a los charcos.