Martín Rodríguez
[San Luis Hoy]
Con el inicio de las fechas oficiales de las posadas, el Centro de Abastos es un punto de muy alta concentración de gente que en diversos tramos provoca vialidades intransitables y horarios extendidos para atender a mayoristas que acuden para surtir sus tiendas, despensas o eventos empresariales.
La mayor parte de los clientes se concentra en puntos de venta de alimentos al mayoreo, tanto de hortalizas y frutas y verduras como de imperecederos.
Algunos mayoristas compran pastas, galletas, vinos y licores, bebidas refrescantes, dulcería, cañas, naranjas, mandarinas, botanitas envueltas en celofán, bolsas, envolturas sin moños, carbón, aceites, productos de salchichonería y cremería, además de otros insumos necesarios.
El proceso de compra suele ser tardado, porque a última hora se juntan cientos de clientes en pocos negocios y saturan las avenidas.
Los transportistas también batallan porque cargan mayores cantidades de mercancía y la depositan en las bodegas que suben el monto de sus pedidos.
En las bodegas, los automovilistas hasta forman filas en espera de ser atendidos para procesar los pedidos al mayoreo.
