Rubén Pacheco
[San Luis Hoy]
Desde la primera agresión sufrida en 2021, se tomaron medidas para evitar afectaciones a las madres buscadoras e integrantes de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas (CEBP), sin embargo, no hay manera de “protegernos”, dijo Edith Pérez Rodríguez, presidenta del colectivo Voz y Dignidad por los Nuestros A.C.
El martes 28 de mayo, un convoy de seguridad que acompañaba a la CEBP, junto con integrantes de colectivos de búsqueda de personas desaparecidas en el municipio de Tamasopo, fue atacado a balazos y en los hechos un militar perdió la vida.
Pérez Rodríguez recriminó que los delincuentes hayan asesinado al soldado, quien dio la vida para proteger al contingente. “¿Cuántos tienen que caer? O sea, estamos en una guerra, en una guerra sin cuartel, porque nosotros vamos a seguir yendo a esos lugares”, enfatizó.
Recalcó que, si deciden acudir a lugares riesgosos, es porque tienen indicios de que sus hijos y familiares desaparecidos podrían estar ahí para tratar de localizarlos, no para ubicar a integrantes del crimen organizado.
La activista lamentó que existe colusión ya no solo las autoridades, a través de algunas policías, sino de la propia ciudadanía que tiene conocimiento que sus hijos o familiares forman parte de organizaciones criminales y los protegen.
“Nosotros sabemos desde un principio que nos enfrentamos a estos riesgos que hemos corrido, no es la primera vez. Solo quecuando andábamos solitas nos corretearon y nos agredieron”.