
Flor Martínez
[San Luis Hoy]

Padres de familia de la escuela primaria Mártires de Río Blanco”, ubicada en la unidad habitacional Fidel Velázquez, denunciaron el presunto desvío de recursos asignados a través del programa “La Escuela es Nuestra”, ejercicio 2024, por parte de la presidenta y tesorera encargada del uso y manejo de este presupuesto.
De acuerdo con declaraciones de integrantes del comité de Contraloría Social, el recurso fue depositado en una sola exhibición el pasado 26 de febrero en la cuenta bancaria habilitada para este fin por el Banco del Bienestar, por la cantidad de 600,000 pesos destinados a mejoras en el plantel.
Entre las obras contempladas estaban la rehabilitación de la cancha deportiva, pintura de salones y otras reparaciones generales. Para el manejo del recurso, se conformó un comité administrativo integrado por una presidenta, tesorera y secretaria, además de un comité de Contraloría Social encargado de supervisar la correcta aplicación del dinero.
La primera erogación fue de 200 mil pesos como anticipo para la rehabilitación de la cancha. Posteriormente, el 3 de abril, se entregaron otros 200 mil pesos. Sin embargo, desde esa fecha, las responsables del comité administrativo dejaron de rendir cuentas claras, asegurando falsamente que el resto del dinero no había sido depositado, lo cual fue desmentido por información oficial del programa.
Padres de familia señalaron que, al no tener respuesta clara ni acceso a los fondos restantes, decidieron cubrir con aportaciones voluntarias aparte de las mejoras necesarias para evitar frenar los trabajos, con la esperanza de ser reembolsados una vez que el recurso federal fuera entregado, lo cual no ocurrió.
Tras múltiples gestiones ante el programa y autoridades, se comprobó que el total del recurso había sido entregado desde febrero. Ante esto, las responsables del manejo de fondos reconocieron haber utilizado el dinero, sin aclarar su destino, y sólo devolvieron parcialmente algunas cantidades: en agosto 30 mil pesos, en octubre 10 mil pesos, en diciembre 15 mil pesos y en enero 12 mil pesos.
Sin embargo, hasta la fecha, el adeudo asciende a 129,903 pesos, según lo documentado por el comité de Contraloría Social.
Debido a esta situación, los padres de familia presentaron una denuncia por peculado ante la Fiscalía General de la República (FGR), además de una queja formal ante la Secretaría de la Función Pública, misma que fue turnada a la Contraloría Interna de la Secretaría de Educación Pública.
Sin embargo, señalaron que los procesos legales han sido lentos y temen que esta situación afecte futuras asignaciones al plantel por parte del programa federal.
Tras lo anterior, hicieron un llamado a la delegación estatal del programa “La Escuela es Nuestra” y a autoridades educativas para que intervengan, brinden acompañamiento jurídico y garanticen el seguimiento de la denuncia, así como la recuperación del dinero faltante, que impacta directamente a los estudiantes.
Temen que el proceso siga retrasándose a poco de que culmine el ciclo escolar, y las involucradas evadan su responsabilidad.