Daniel Ortiz
[San Luis Hoy]
Lo que comenzó como una auténtica manifestación pacífica en defensa de una alumna víctima de agresión sexual dentro de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), terminó dejando nuevas víctimas —mujeres— de violencia física y verbal en el segundo día de protestas.
Durante la manifestación de este martes, que derivó en un encuentro entre miles de inconformes y directivos universitarios, primordialmente funcionarias fueron objeto de insultos y expresiones abiertamente misóginas por parte de un grupo de hombres que se encontraba entre el contingente estudiantil.
En videos difundidos se escuchan frases misóginas que aluden a la vida íntima de funcionarias y directoras de la Máxima Casa de Estudios. A pesar de que entre los directivos había más hombres que mujeres.
Los ataques ocurrieron primero en la Plaza de Fundadores, al exterior del Edificio Central, donde los insultos derivaron en empujones, gritos y ataques directos con botellas de agua y otros líquidos. Más tarde, la ofensiva continuó en Plaza de Armas, frente a Palacio de Gobierno, sin la presencia de un solo elemento de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.
Las escenas, grabadas en teléfonos móviles y difundidas ampliamente, provocaron desconcierto e indignación dentro y fuera de la comunidad universitaria, al evidenciar cómo una protesta que pedía justicia y respeto hacia las mujeres terminó replicando la misma violencia que estaba condenando.
Por su parte, la UASLP, a través de un comunicado oficial, acusó la infiltración de personas externas a la Universidad, aunque actores políticos ligados al oficialismo lo han negado.
De igual forma, la Máxima Casa de Estudios estableció en su más reciente comunicado que no habrá represalias contra integrantes del movimiento.