
Martín Rodríguez
[San Luis Hoy]

Con una ceremonia de bajada de imagen, la iglesia católica potosina solicita a la Virgen de Guadalupe, agua y minería.
La Bajada de la Virgen de Guadalupe, fue necesaria para llegar a catedral y ser honrada como Patrona de Aguas, Minas y Comercios.
La imagen fue acompañada para honrarla, amarla e invocarla como Patrona de Aguas, Minas y Comercios, como se hace desde el año 1771, por lo que será su edición 253 de venerarla para pedirle por la lluvia suficiente y conveniente para nuestros campos.
La imagen guadalupana permanecerá en la Catedral por una semana, lo que permitirá a los feligreses practicantes de la religión pedirle que interceda para que las condiciones concedan la lluvia conveniente para los campos, sembradíos y animales que requieren de ese elemento vital, pues hay excesiva sequía.
Los religiosos solicitaron pedir fervientemente el don de la lluvia “y la paz tan anhelada para nuestro México”.
La convocatoria previa a todos los fieles Guadalupanos en general, corrió a cargo del canónigo Gabino Medina Portales, rector y párroco de la Basílica de Guadalupe, y los vicarios parroquiales Ramiro Hernández Herrera y Rodolfo Duarte Ramírez, titular de la Dimensión de Pastoral de Adolescentes y Jóvenes (DIPAJ).