“POR un pelito”…
NUNCA antes la anterior frase pudo tener más peso y significado que el pasado sábado, cuando un joven de apenas 20 años, militante del Partido Republicano, disparó ocho tiros de un rifle AR-15, contra al expresidente de los Estados Unidos Donald Trump, en un mitin en la pequeña ciudad de Butler, en el estado norteño de Pensilvania. Por milímetros, el magnate se salvó de la muerte…
“CUANDO te toca aunque te quites; cuando no te toca, aunque te pongas”…
UNA bala rozó la oreja de Trump y le causó sólo un rasguñó, pero esa misma bala le hizo más daño a Joe Biden, hiriéndole de muerte políticamente hablando. El objetivo del atentado era el candidato republicano, pero su contrincante demócrata es quien sufre hoy las consecuencias. De por sí Biden, quien busca la reelección en las elecciones del próximo noviembre, en las dos últimas semanas había sufrido una fuerte presión, incluso desde adentro de su mismo partido el Demócrata, pues varias voces de altos personajes pedían que renunciara a la candidatura debido a sus constantes y cada vez más recurrentes dislates, traspiés y lapsus que ponen en duda su capacidad mental y cognitiva debido a su avanzada edad (81 años)…
BIDEN está en el ojo del huracán, no por sus políticas, escándalos o por el desempeño de sus deberes, incluso, expertos aseguran que estos cuatro años de gestión del demócrata han sido positivos para la Unión Americana. Sin duda las dos anteriores semanas han sido las más difíciles del todavía presidente de los EU y, al parecer, esta que comienza será peor. Su calvario comenzó el 27 de junio pasado, en el primer debate presidencial, donde al frente de una audiencia de alrededor de 50 millones de espectadores, Biden decepcionó por su pobre desempeño, falta de energía, claridad y algunos dislates…
EN contraste, su contrincante Donald Trump, sin destacarse ni decir nada importante, y a pesar de sus 78 años de edad, se presentó como un hombre enérgico, atento, agresivo. Las alarmas en el cuartel Demócrata comenzaron a sonar y el rumor de un posible relevo de candidato sonó más fuerte, para esas fechas ya las encuestas le daban al Republicano una ventaja de 6 puntos. La cosa empeoró para el presidente de los EU la semana pasada, cuando en una importante reunión cumbre de la OTAN, donde Biden fungía como anfitrión, la atención se centró no en los acuerdos para respaldar a Ucrania o analizar el conflicto Palestino-Israelí, sino en las metidas de pata del octogenario…
BIDEN presentó al Presidente de Ucrania, Zelenzky como “el presidente Putín”, el archienemigo del mandatario ucraniano, minutos después, confundió a su vicepresidenta Kamala Harris como “vicepresidente Trump”, y el último, confundió China con Rusia, todo, frente a las cámaras y representantes de medios de comunicación de todo el mundo y aunque corrigió de inmediato, el daño ya estaba hecho. Ahora sí congresistas y altos mandos del ala Demócrata, públicamente, pidieron a Biden que renunciara a la candidatura, de inmediato los nombres de Kamala Harris, de Michelle Obama y del gobernador de California se barajearon para el relevo…
EL atentado fallido contra Trump lo catapulta en las encuestas en vísperas de la Convención Republicana, donde elegirá a su candidato y que inicia hoy en el estado de Wisconsin, donde Donald llega en calidad de héroe. Con el colmillo que le da los años y un olfato de magnate para detectar oportunidades: tras los disparos, Trump, rodeado de elementos del Servicio Secreto, despeinado y sangrando de la oreja, sabiéndose ser el centro de atención del mundo y la presencia de decenas de fotógrafos, levantó el puño de forma desafiante, y grita “¡fight, fight, fight!” (peleen, peleen, peleen), exactamente encima de ellos, un cielo despejado, azul intenso y una bandera de las barras y las estrellas ondeaba, logrando en conjunto, una de las fotografías que sin duda pasarán a la historia y que definirá toda la campaña de Trump, sin duda, una imagen que podría darle el triunfo al republicano en noviembre…
UN Biden en picada, cuestionado sobre su capacidad mental y con reclamos para que renuncie, en frente, un Trump convertido en víctima, en héroe, todo un superviviente a pesar de ser un mitómano, un pillo y un gran simulador. La encrucijada para los Demócratas ahora es si la renuncia de Biden a la candidatura sería suficiente para derrotar a un empoderado y en ascenso Trump, pues tras el incidente de Pensilvania, Kamala Harris, Michel Obama y otros que se mencionaban para relevar a Biden, ahora lo pensarán dos veces. Otros cuatro años de Trump en la Casa Blanca ponen a temblar al mundo y principalmente a sus vecinos del sur, o sea nosotros, en fin…Armando Acosta