(El Universal)
SAN JOSÉ, Costa Rica.- Con dos frases contundentes, la venezolana Tamara Taraciuk Broner, directora interina de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW), desnudó la situación de los derechos humanos en México en 2021. “México no sólo no es un ejemplo, sino que tiene uno de los peores récords en materia de derechos humanos en toda la región”, dijo en alusión al grave panorama interno.
“Para terminar con los abusos contra migrantes, el gobierno [mexicano] debería dejar de hacer el trabajo sucio de Estados Unidos y empezar a cumplir con su responsabilidad de acoger a quienes huyen de violencia y persecución”, alertó, al referirse a la política mexicana de servir de muro de las corrientes migratorias que buscan llegar a suelo estadounidense.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, “ha priorizado debilitar el Estado de derecho y las instituciones democráticas más esenciales, empezando por la independencia judicial, que es un contrapeso clave en cualquier democracia”, afirmó Taraciuk, máster en Derecho por la (no estatal) Universidad de Columbia, Nueva York. En entrevista con EL UNIVERSAL, la funcionaria de HRW aseguró que “López Obrador no da ningún indicio de comprender que la actuación de las Fuerzas Armadas, esencialmente sin control civil, durante los dos sexenios anteriores dio lugar a graves abusos. Por el contrario, el Presidente parece confiar ciegamente en los militares”.
En su informe anual sobre la situación mundial de los derechos humanos que difundió este jueves en Washington, HRW— agrupación no estatal con sede en esa capital— denunció que las fuerzas militares mexicanas siguen cometiendo abusos contra los derechos humanos y que la impunidad persiste en México, mientras que las torturas, las desapariciones forzadas y las agresiones a migrantes y periodistas se mantuvieron inalterables en 2021.
