Zona norte la más contaminada

Leonel Mora

[San Luis Hoy]

Entre la contaminación de las ladrilleras y los sustos ocasionales de la Planta de Zinc de Grupo México, la población que reside en el norte de la ciudad capital vive en una incertidumbre constante respecto a la calidad del aire que se respira en el sector y las consecuencias que esto puede traer a largo plazo a la salud de las familias.

De las cuatro estaciones de monitoreo de la calidad del aire que operan en la zona metropolitana, es la del norte, ubicada en una biblioteca pública del fraccionamiento Industrial Aviación, es la que con mayor frecuencia reporta altas concentraciones de partículas nocivas para la salud.

La principal causa sería la operación de diversas ladrilleras ubicadas en el amplio sector que existe entre el parque Tangamanga II y el Anillo Periférico Norte, en donde grandes y densas columnas de humo negro se levantan por la quema sin control de toda clase de materiales.

Quienes habitan en colonias cercanas a las ladrilleras, sufren la concentración de ceniza en su ropa, pelo, fachadas de sus viviendas, el toldo de sus automóviles, etcétera, pero sufren aún más las afecciones respiratorias derivadas. La menor de ellas, una alergia persistente.

Hasta ahora, ninguna autoridad relacionada con el cuidado del medio ambiente, sea municipal, estatal o federal, ha implementado solución alguna para terminar con la contaminación de las ladrilleras. Al contrario: con el argumento de la suspensión de actividades de gobierno debido a la pandemia de Covid-19, las supervisiones sobre este tipo de empresas cesaron y los ladrilleros operan a sus anchas.

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