Martín Rodríguez
[San Luis Hoy]
A quince años del inicio de la construcción del Rastro Municipal de Peñasco, éste sigue sin obtener la certificación Tipo Inspección Federal (TIF). Su historia se ha ido en una serie de suspensiones de obra por causas diversas y cuestiones políticas, desde 2007 a la fecha.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, informó que, a través del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), durante 2020 fueron certificados o recibieron ampliación 463 establecimientos TIF ubicados en 30 entidades, con lo que se fortalecen las acciones para garantizar alimentos sanos e inocuos para la población, pero ninguno de los rastros certificados, ya sea público o privado, pertenece a San Luis Potosí. Todo el año pasado la dependencia entregó 463 certificados TIF.
En 2020, Senasica otorgó 22 nuevas Certificaciones: siete en Nuevo León, tres en la Ciudad de México, tres en el Estado de México, dos en Guanajuato, dos en Querétaro, dos en Aguascalientes, una en Hidalgo otra en Puebla y una más en Sonora.
Además, entregó 40 ampliaciones: 14 en Nuevo León, cinco en el Estado de México, cinco en Sonora, tres en Guanajuato, dos en Jalisco, dos en Ciudad de México, dos en Puebla, dos en Querétaro y una en Tamaulipas, Veracruz, Sinaloa, Chihuahua e Hidalgo. También se otorgaron 39 renovaciones.
Se otorgaron 314 constancias a Médicos Veterinarios Responsables TIF (MVRATIF), por lo que actualmente Senasica cuenta con 893 veterinarios, quienes de manera permanente inspeccionan los procesos que se llevan a cabo en los 463 establecimientos TIF.
El 68% de los rastros TIF genera cárnicos para consumo nacional, mientras que el 32% exporta a 65 mercados internacionales.
En estas plantas se realizan actividades de sacrificio, corte y deshuese, marinado, elaboración de comidas preparadas crudas, cocidas y embutidos, almacenamiento frigorífico, procesamiento de ovoproductos, miel y productos de la pesca y acuacultura.
