Ruth Salazar
[San Luis Hoy]
Un proveedor de uniformes de la campaña por la gubernatura de Mónica Rangel Martínez demandó a la exsecretaria de Salud y a dos de sus colaboradores, ya que no le pagaron el producto que entregó con valor de 655 mil pesos.
Se trata de Juan Carlos Ramos Sainz, dueño de Cuore Precisión Textil, empresa que fue contratada por Servicios de Salud de Gobierno del Estado en 2020, cuando Mónica Rangel era la titular, posteriormente, cuando dejó el cargo para postularse a la gubernatura, lo mantuvo como proveedor de uniformes para la campaña política.
Por medio del coordinador de campaña, Emmanuel Bandala Magallón, el proveedor acordó dotar de todos los uniformes que usó Monica Rangel y su equipo de trabajo, compras que le pidieron sin requerir factura o la firma de un contrato de compra-venta.
Juan Carlos Ramos relató que siempre se le entregaron a tiempo las prendas, a pesar de que a veces le daban tiempos de entrega de menos de 24 horas, y sin adelanto previo, tampoco le firmaban de recibido de la entrega de mercancía.
Para subsanar sus gastos, por toda la inversión que realizó para la entrega de los uniformes y la falta de ventas por la pandemia, Ramos Sainz tuvo que vender la maquinaria para bordado, posteriormente, lo cual desencadenó el cierre de la empresa a finales de 2021.
De acuerdo con el empresario, él no es el único proveedor a quien le quedaron a deber de la campaña de Mónica Rangel, pues cuando iba a cobrar a las oficinas del partido Morena, que la postuló, una secretaria le dijo que durante meses desfilaron decenas de proveedores que buscaban se les pagara por diversos servicios y productos.
Asimismo, relató que la dirigencia de Morena “se lavó las manos” con el argumento de que Mónica fue una candidata impuesta, entre otras justificaciones.