Jaime Hernández
[San Luis Hoy]
En medio de las denuncias de personal médico del Hospital Central Ignacio Morones Prieto por falta de medicinas y equipo, la institución reveló que su partida para medicamentos fue afectada en 2020 por una reducción de casi 30 millones de pesos, además de un subejercicio de otros 42 millones de pesos.
De acuerdo al análisis detallado de egresos del hospital regulado por la Ley de Disciplina Financiera incluido en la cuenta pública 2020 del hospital, el año pasado apenas se devengó el 72% de los 261.2 millones de pesos previstos para la compra de productos químicos, farmacéuticos y de laboratorio.
Esta era la suma original presupuestada para ese ramo, y estaba compuesto por 236.2 millones de pesos de origen estatal y 25 millones de pesos provenientes de la Federación.
Sin embargo, el hospital sufrió un recorte de 158.1 millones de pesos en su partida estatal, que quedó reducida a 78.1 millones de pesos.
Y aunque el financiamiento federal tuvo una partida adicional de 128.3 millones de pesos, no bastó para impedir que el presupuesto para medicinas perdiera 29.8 millones de pesos. El presupuesto para compras de medicamentos se redujo así a 231.4 millones de pesos.
Pero además, de acuerdo al reporte, el Hospital Central limitó aún más la compra del medicamento al declarar un subejercicio de 42 millones de pesos que no se devengaron al cierre de 2020.
Al vencerse ese plazo, el Hospital Central gastó 189 millones de pesos en la partida para fármacos.
En materia de vestuario y prendas de protección sanitarias, se previeron 6.6 millones de pesos, mismos que fueron erogados en su totalidad.
Mientras que en el rubro de equipamiento e instrumental médico, el Hospital Central reportó un presupuesto de solo 553 mil 557 pesos, sin que se haya declarado un subejercicio.
En días pasados, personal médico del hospital Central ha denunciado la escasez de medicinas y equipo, al grado de realizar bloqueos frente al nosocomio.
