Rubén Pacheco
[San Luis Hoy]
En lugar de generar un impacto positivo de seguridad en la sociedad, la instalación de puntos de revisión en las entradas a la capital y al estado de San Luis Potosí, puede generar corrupción si no se controlan y monitorean, evaluó Francisco Salazar Soni, especialista en seguridad pública.
Recientemente el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, anunció que esta semana iniciará la colocación de cámaras de videovigilancia con reconocimiento facial, en las entradas a la capital y al estado de San Luis Potosí, donde también habrá filtros con perros adiestrados en la detección de drogas y armas, así como baños, oficinas y celdas de detención.
Salazar Soni dudó sobre la aplicación de este tipo de acciones, derivado de las observaciones referidas, pues en todo caso requerirá del monitoreo de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y la unidad de Asuntos Internos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
“En vez de generar una simpatía hacia la ciudadanía, va a generar un rechazo. Los arcos son una cosa y los filtros de revisión o los famosos retenes que ya se han instalado, pues hemos visto que lo único que causan es alta corrupción entre los elementos”, subrayó.
El experto adujo que la opción puede ser la colocación de observadores en ciertas unidades y patrullas, donde los vehículos con características sospechosas, que infrinjan el Reglamento de Tránsito o en coordinación con el gobierno federal, se puedan detener carros para su revisión.
