DESDE 2009, el mismo grupo político, “la gallardía”, ha logrado sostener en su poder la alcaldía de Soledad de los Ranchos, de 2009 al 2019 bajo las siglas del PRD y en esta elección logró su quinta presidencia municipal consecutiva en esta demarcación, en la figura de Leonor Noyola Cervantes, ahora cobijada por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), es evidente que independientemente por el partido que compitan, este grupo ha logrado permanecer en el poder municipal, borrando del mapa político a vieja clase política del PAN y del PRI que, incluso, en los pasados comicios, ni juntos estuvieron cerca de hacerle mella al “gallardismo”, que los superó en proporción de casi 3 a 1 en las urnas…
DURANTE los mandatos de Gallardo Juárez, luego de Gallardo Cardona y los dos trienios consecutivos de Gilberto Hernández Villafuerte, este grupo construyó un equipo de colaboradores que con los años perfeccionaron su trabajo en el ayuntamiento, y a la par una sólida estructura social-electoral que rindió sus frutos al ganar la gubernatura en las pasadas elecciones. El problema actual de la alcaldesa Leonor Noyola es que ese grupo base de colaboradores que hacían fuerte el trabajo emigró, por obvias razones, a la administración estatal, desmantelando por completo al ayuntamiento. Perfiles de colaboradores como Guadalupe Torres, José Luis “el chiquis” Fernández, Emmanuel Ramos, Salvador González, los “Gerardos” Alfaro y Zapata, Ernesto Barajas, Juan Manuel Navarro, e incluso los de más bajo nivel como “la maistra Chela Gaitán, Fernando Gámez, Dolores “Lola” García Román, “Nachito” Segura, “Eloyito” Frankin, entre otros muchos, abandonaron Soledad de los Ranchos y se fueron, la mayoría al gabinete estatal y otros más de diputados …
EL problema para la actual alcaldesa Leonor “mamaleo” Noyola es que para armar su gabinete se quedó, con algunas contadas excepciones, con gente sin la más mínima experiencia, lo que la obligó, malamente, a recurrir a “cartuchos quemados”, personajes de dudosa reputación que incluso la gallardía había desechado desde hace muchos años por incompetentes y corruptos, dos claros ejemplos de esto es el director de Protección Civil municipal, Martín “el comandante gelatinas” Bravo Galicia y el impresentable y torvo director de la Policía Municipal, Jorge “el maruchan” Ramírez Leyva…
“EL comandante gelatinas” Bravo Galicia nada más no da una, incluso, en 2016, siendo alcalde de la capital Gallardo Juárez, lo cesó fulminante y púbicamente bajo el argumento de no hacer un buen papel como titular de Protección Civil, es decir, lo corrió por inepto. De “el maruchan” Ramírez Leyva, su historia de corrupción e incapacidad es más larga; Ramírez Leyva ha salido y entrado de la corporación municipal en innumerables ocasiones, casi todas debido a escándalos de corrupción; es evidente que su tren de vida no concuerda con su salario de funcionario, al contar con varios vehículos de lujo, concesiones de taxi y darse una vida ostentosa…
EL problema es que “árbol que nace torcido, jamás su tronco endereza¨ y tal es el caso de Ramírez Leyva, que continúa con sus malas prácticas y chanchullos, por ejemplo, el designar en los altos mandos de la corporación a perfiles de dudosa reputación y hasta con antecedentes penales, el caso ya es delicado a tal grado de que hay gran molestia de los elementos, a los cuales por órdenes de Leyva se les está exigiendo cuotas diarias por turno y por patrulla, para estos fines sus esbirros son: la comandante Yara Margarita Leura que no pasa ni un examen antidoping, el comandante Sierra encargado de asignar las patrullas y exigir las cuotas, Lara Niño, el encargado de cobrar las cuotas, la secretaria de nombre Fátima que recibe las cuotas y una tal comandante Marisol, el problema es que de seguir estas corruptelas y de no tomar cartas en el asunto la alcaldesa, podría haber en los próximos días un paro de labores en la policía…
LA administración de Leonor Noyola no despega, la mayoría de sus colaboradores están pasmados y amodorrados, no se diga la secretaria general Yoloxóchitl Díaz; por ejemplo, las anteriores administraciones gallardistas se distinguían porque en sus obras de pavimentación siempre utilizaban materiales de buena calidad como el concreto hidráulico, ahora, en la obra de rehabilitación en la entrada de la Col. La Virgen se está aplicando sólo una delgada capa de emulsión asfáltica, es decir, chapopote con gravilla que no sobrevive a las primeras lluvias. De no levantar la cabeza y realizar cambios en su gabinete, Leonor Noyola corre el riesgo de tener una desastrosa administración y poner en riesgo la continuidad del gallardismo en la presidencia municipal, cuando tiene la oportunidad histórica de hacer un mucho mejor papel, pues ahora tiene el respaldo de un gobernador, líder de su grupo político, en fin…Armando Acosta
