MÁS “Sanjuanas” esperan que alguien voltee a ver sus procesos penales, sobre todo por juicios que presumen imputaciones falsas, juicios desiguales y falta de defensa, que las han mantenido en la cárcel por décadas…
EL otro lado de la moneda se encuentra en la procuración e impartición de justicia, donde también hay graves problemas, que ya no solo vienen de un sistema penal inquisitivo y cargado de cerros de documentos que no llevan a nada, sino también de decisiones de oralidad penal que todavía no terminan de ser perfectas…
ES más, todavía no termina de cuadrar la experiencia de los agentes de Ministerio Público para procesar los casos de manera imperturbable, y como eruditos en la materia penal, porque se atoran en la litigación oral, y en ocasiones no van preparados…
UN ejemplo se refiere al agente de Ministerio Público varón que a lo largo de la audiencia de imputación a los señalados como propietarios, administradores y operadores del antro “Rich”, se atoró una y otra vez, eso sí con argumentos congruentes, pero con una exposición del caso con demasiada paja, datos innecesarios y obviedades…
FUE una audiencia indeseable para los amantes de la síntesis, de las cosas claras y concretas, sin rodeos y directo al grano; un proceso de imputación que pudo haberse llevado cinco horas se extendió a siete…
NO es el tipo de argumentación floja para el asunto del antro, pero sí de que con tanto enredo, a la larga los agentes de Ministerio Público pueden hacer bolas al juez o peor aún, si su señoría es de atención dispersa, puede que sea necesario cambiar de fiscal del caso, por lo menos para establecer la situación jurídica de manera sólida y para ordenar la investigación complementaria y en su caso la libertad o la vinculación a proceso…
SIN embargo, abundan los casos donde escasean los testigos, hay pocos datos de prueba, a veces el más localizable es el menos involucrado, y en ocasiones los datos grafoscópicos, dactiloscópicos, de balística y tiro, o incluso de peritajes contables, pueden ser confusos o comprometer una investigación más profunda…
PERO si para un caso, el asunto cae en manos de agentes del Ministerio Público medio guajes para hacer su trabajo, entonces se corre el peligro de juzgar a alguien por un delito que no cometió, o de cargar las imputaciones a personas que no están involucradas, o de llevar a juicios que se caen en tribunales superiores…
AYER fue presentada en el Congreso del Estado la Ley Sanjuana, un proyecto para regular el único artículo constitucional que permite el indulto, dar forma jurídica al proceso y a las condiciones, siempre y cuando exista una investigación inadecuada, una clara violación a los derechos humanos, o un sistema de defensa deficiente…
ESE proyecto de ley contrasta con un documento burdo, hecho a la carrera y con más dosis de oportunismo que de generosidad, de parte del diputado Rubén Guajardo, quien promovió una iniciativa de indulto para delitos que no son graves; al señor se le olvidó que no se está hablando de delincuentes, sino de personas cuya inocencia pesa más sobre la imputación, y cuyo proceso violó toda condición garantista; vaya que el legislador tenía prisa por lucir en las cámaras, y se le olvidaron los derechos…
ESPERA mucho trabajo al Poder Legislativo para analizar la iniciativa ciudadana; la sugerencia es que la de Rubén Guajardo no sea tomada tan en serio, si es que el señor no entendió cuál es el espíritu del indulto.