Ante el riesgo, cobertura
Muchos de los trámites y la documentación que hoy en día pueden parecernos un engorro burocrático, tienen el objeto de proteger y salvaguardarnos de ciertas situaciones donde, tarde o temprano, necesitaremos de los mismos. Es el caso de las pólizas de seguro, cuya utilidad radica en encontrar un refuerzo ante un posible riesgo, de distinta índole, que hayamos acordado con la aseguradora. O, en otras palabras, un blindaje de indemnización mediante contrato ante cualquier tesitura que pueda atentar tanto contra nuestra seguridad como la de nuestros bienes. Tan simple, y a la vez tan relevante, como eso.
Evidentemente, elegir un seguro en México no es una tarea sencilla. Son muchos los factores que debemos tener en cuenta por activa y por pasiva en el momento de contratar un seguro de calidad y que, por lo tanto, realmente nos beneficie en caso de necesitarlo. Como bien se informa aquí, no existe un seguro que valga para todo, y mucho menos cuando éste trata de cubrir elementos específicos y que, además, están estrechamente relacionados con cierto sector laboral. O, en otras palabras, no es necesario contratar un seguro sobre maquinaria pesada o tecnología si cuanto queremos proteger es nuestro hogar.
¿Qué seguro es el más adecuado?
A fin de facilitar la elección, existen plataformas como Elegirseguro.com cuyo filtro de seguros por industria y por cobertura resulta increíblemente liberador. Dado que es más que posible que una aseguradora nos ofrezca un paquete completo de cobertura donde, quizá, se añadan supuestos que jamás nos ocurrirían por la naturaleza de nuestro negocio, siempre viene bien escoger coninteligencia y espíritu analítico. Eso sí, a sabiendas de que un buen seguro es aquel que, además de un precio asequible, cubre un gran repertorio de posibles riesgos. Pero donde conviene añadir por su frecuencia la cobertura de catástrofes naturales, porque ¿quién sabe?
Como se ha comentado, si bien un negocio de la industria gastronómica debería incluir en su póliza de seguro un paquete general de daños de corte empresarial, una empresa constructora precisa de seguros específicos sobre la maquinaria o las acciones de construcción, demolición o excavación. Ahora bien, un requisito indispensable en todo seguro son los gastos médicos mayores, dado que, en cualquiera de los casos, el capital humano es el engranaje central que mueve el negocio y, por lo tanto, velar por él es hacerlo también por el rendimiento de la empresa.
Siguiendo con las especificaciones, una startup tecnológica debe percibir especificaciones adicionales a la naturaleza de su negocio, como lo es la protección contra los ciberataques. Un delito que sucede más frecuentemente de lo que uno pueda imaginarse y que, en caso de cometerse exitosamente, podría perjudicar todo nuestro negocio y, además, causar daños y perjuicios a terceros en caso de acceder a nuestra base de datos. Algo que, por cuanto se refiere a la usurpación de información de los clientes, también podría suceder en una industria como la hotelera y que, por lo tanto, debe estar a la orden del día.
Determinación y filtros de búsqueda precisos
En cualquier caso, es preciso insistir en que un paquete de seguros de calidad no es aquel que más posibles riesgos abarca, sino el que incide justamente en los riesgos que más puedan acontecerse en el desarrollo de nuestro negocio. Y, por supuesto, que ello no implique un sobrecoste en el contrato final, sino que tenga en cuanta la realidad de nuestra empresa y sus posibilidades económicas. Esto último, porque es más probable que una gran tienda de productos muy destacados en sociedad sufra, por ejemplo, un robo o un ciberataque, que un pequeño comercio. Pero, asimismo, una empresa emergente que apunte grandes expectativas de futuro podría ser también víctima de dicho supuesto.
En definitiva, la forma más idónea de encontrar el seguro ideal para nuestra empresa es a través de un exhaustivo procedimiento de búsqueda y filtraje. Donde, con coherencia y habiendo identificado previamente las necesidades específicas de nuestro negocio, nada quede abierto a la fuga de riesgos no concebidos. Tan simple, y a la par tan complejo, como dedicar tiempo de acierto a un análisis que resultará de suma importancia, y con ello de gran alivio, para nuestro desarrollo profesional en aras de combatir cualquier riesgo hábil que, desafortunadamente, pueda incidir en nosotros. Porque, redundantemente, una póliza de seguro se debe, efectivamente, a la seguridad que debe transmitir a quien la contrata.
