Flor Martínez
[San Luis Hoy]
Librado y Marcelo Gaytán son dos adultos mayores que pese a la contingencia sanitaria o el clima no detienen sus actividades y salen diario a buscar el alimento para su pequeño ganado.
En la calle de Rayón en la colonia centro de Soledad se localizan sus viviendas y aquí mismo cuentan con un corral de vacas y caballos, mientras don Librado sale en su caballo que empuja una carreta llena de forraje o rastrojo, don Marcelo hace lo mismo por medio de su burrito que de igual manera jala un pequeño carretón donde recolecta alfalfa y pencas de maguey a su más de 70 años.
Los ganaderos señalaron que, aunque cuentan con pocos animales, y a veces tiende a ser complicado comprar el alimento o conseguir forraje, tienen años dedicándose a esta actividad.
La pandemia no ha detenido sus actividades ya que consideran que su trabajo no los expone al virus, además de que a diario se encomiendan a Dios. “Se dicen muchas cosas en la tele, que la gente adulta no salga, pero tenemos que trabajar para alimentarnos nosotros y alimentar a nuestros animales, ahora sí que sea lo que Dios quiera”.
Indicaron que así llueva o haga frío, están acostumbrados a los cambios del clima, y aunque viven en casas humildes, durante casi toda su vida han salido adelante con la cría de vacas, caballos, gallinas y cerdos.
“Nosotros no nos podemos quedar en la casa, tenemos trabajo que hacer porque los alimentos no nos van a llegar a la puerta”.