[Efe]
Ciudad de México.- La película “Ya no estoy aquí”, de Fernando Frías, se coronó como máxima ganadora en los premios Ariel con diez estatuillas -de las trece a las que estaba nominada- en una noche muy diferente para el cine mexicano con una ceremonia virtual.
“Faltan las palabras para decir lo emocionados que estamos. Ha sido un camino larguísimo y muy difícil. Es una película que se hizo con muchísimo cariño y es enorme poder recibir esta calidez y este reconocimiento, esperemos que (la cinta) sirva de ejemplo”, expresó Frías a través de una conexión virtual entrecortada durante la 62 edición de los premios Ariel de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC).
HISTORIA
La película de Frías relata la historia Ulises, un joven que forma parte de la banda los “Terkos”, quienes están inmersos en la cultura de la música Kolombia, popular hace años en la ciudad norteña de Monterrey. Después de problemas con un cártel local, Ulises tiene que huir a Estados Unidos, donde se encuentra con problemas de adaptación.
Además de llevarse el premio Ariel en la categoría reina (mejor película), el filme también le dio a Frías el galardón a mejor director.
La cinta fue una carrera de fondo, ya que el director tardó 7 años en realizarla. Desde el principio se adentró en los barrios de Monterrey para poder conocer en profundidad sus diferentes zonas, además de encontrar a los chicos que luego se convertirían en los protagonistas de la historia de los “Terkos”.
ACTOR REVELACIÓN
Juan Daniel García, quien no sabía bailar antes de “Ya no estoy aquí”, se hizo con el galardón a mejor actor revelación, ya que nunca había actuado anteriormente.
“Muchas gracias. Estoy muy nervioso, estoy temblando. Quiero agradecer infinitamente todo esto a mi familia, mi mamá, y sobretodo a Bernardo Velasco, que fue mi ‘coach’. Hacer películas como esta es muy difícil. Gracias Fernando Frías y arriba los ‘Terkos’”, expresó el joven actor.
Para Frías fue importante trabajar con actores naturales ya que su objetivo fue contar una historia desde un punto de vista social, y escoger a chicos familiarizados de alguna manera con el movimiento de las Kolombias le resultó la única manera posible de dar voz a estos grupos tan desconocidos por muchos.
