Martín Rodríguez
[San Luis Hoy]
Ahualulco.- En Ahualulco del Sonido 13 el tiempo no transcurre… ni cuando hay pandemia. El comercio se ejerce abiertamente, los visitantes llegan y constatan que técnicamente no hay ningún control, no hay distanciamiento, pocos usan cubrebocas y las medidas de uso de gel antibacterial quedan a la libre decisión.
Los domingos es común que las familias acudan a la cabecera municipal a realizar sus compras, aprovechando el tianguis que se instala en las proximidades de la plaza pricipal municipal.
Por igual, acuden personas mayores que familias completas, y nadie usa por lo menos un cubrebocas, y raras veces hay medidas
de distanciamiento.
En la tierra natal del compositor y creador del Sonido 13, Julián Carrillo, los clientes de los mercados llegan desde las ranchos y comunidades cercanas, que acuden a abastecerse de mercancías, a pasear de incluso a divertirse y comer.
En el municipio, es posible desayunar pozole, menudo, consomés, tacos o cualesquiera de los productos típicos el municipio.
Sin embargo y sin importar el color del semáforo sanitario de la autoridad federal, para los visitantes es “domingo de plaza”, día de compras, y de encontrarse con otras personas, como si no hubiera pandemia.